Le dije que si, aun que no entendí sus comentarios, pensé que eran algo sarcásticos o no se. Me fui a mi cuarto y me di un regaderaso rápido, y me pareció oír ruidos en mi cuarto cuando me bañaba, y grite:
-¿Fer? ¿Eres tú?
Se abrió un poco la puerta del baño y me dijo:
- si soy yo, apúrate que tengo hambre, voy a ir sacando algo de ropa para que te pongas para que no te tardes tanto.
-ush!! No, deja mi ropa en paz
Apurale! respondió
Algo forzada le dije:
-Bueno esta bien, solo no revuelvas mis cosas eh.
Pensé que seguramente iba a sacar lo primero que encontrara, pero cuando salí, para mi sorpresa encima de la cama estaba dobladita mi ropa, me había puesto un suetercito rosita con rayitas blancas que es largo y entallado en la cintura y lo uso como vestidito, unos tenis que tienen como algo de taconcito, pero lo que me sorprendió fue que encima de todo estaba un conjunto de bra y tanguita, el bra es uno blanco que tiene un poquito de encaje en la orillita y la tanguita es blanca y tiene un moñito rojito en la parte de enfrente. Me sentí algo rara de que mi hermano viera mi ropa interior, pero en fin, me vestí, me arregle rápido el pelo, un poco de maquillaje y salí, mi hermano me miro con unos ojos que no se me van a olvidar nunca, creo que fue la primera vez que note que alguien me miraba así, como de una manera morbosa, el sabia hasta que ropa interior llevaba, me sentí extraña... aun que admito que algo se empezó a encender dentro de mi...
Me dijo:
-Bueno pues vámonos, súbete a mi carro.
Lo hice y note que su mirada no se despegaba de mi, me veía de arriba a abajo, según el discretamente, pero obvio lo note. Yo estaba algo confundida, tal vez era solo mi imaginación... y en ese momento estábamos los dos dentro del carro cerro la puerta y fue un silencio raro, yo no sabia que decir... y el puso su mano en la palanca de velocidades, me miro a los ojos, sentí su miraba un poco diferente como si me quisiera hablar con los ojos y luego bajo su mirada lentamente, recorriendo mi cuerpo, desde mis labios que tenían un poco de brillito, mi cuello que dejaba ver el sweater holgado que traía, la silueta de mis pechos que se dibujaban en la tela, pasando por mis caderas y termino en mis piernas descubiertas, ya que el sweater no cubría mucho, solo lo esencial, mis piernas se veían suavecitas por el baño y la cremita que uso, y el silencio me estaba matando, su mano se movió y se dirigía hacia mi rodilla, le dije:
- que haces?
- nada, no te muevas.
Puse cara de intriga, su mano se puso en mi rodilla y me dijo.
- hay hermanita (suspiro y se mordió un poco el labio inferior) estas creciendo muy rápido, solo quiero decirte que yo te voy a cuidar eh, por que ya te estas convirtiendo en toda una señorita y muy hermosa...
Al decir eso no dejaba de ver mis piernas, que yo las tenia juntitas, el empezó a mover sus dedos como acariciando mi rodilla, me hacia cosquillitas, le dije
-ya fer!... me haces cosquillas
El no dijo nada, y con la misma mano, jalo levemente mi pierna hacia el, para separarlas un poco... y siguió con la yema de sus dedos acariciando mi rodilla, empecé a sentir rico y le pregunte ya con una voz un poco mas baja
- que haces?
Respondió con una voz suave y tierna
- le estoy haciendo cosquillitas a mi hermanita....no te gusta???
No pude responderle inmediatamente por que un ligero escalofrío recorrió mi cuerpo, haciendo que mi espalda se curveara un poco, mis pompis se hicieron hacia atrás, recargue mi cabeza en el asiento, mi corazón se agitaba e hizo que tomara una ligera bocanada de aire por la boca, mis ojos se empezaron a cerrar...los dedos de sus manos empezaron a moverse hacia la parte interna de mi muslo, sin dejar de acariciarme, lo hacia muy despacito....me decía
-que piel tan suave tienes nena...
Por un momento creo que me deje llevar y abrí un poco mas mis piernas...sentía como me empezaba a excitar.. Sus dedos se empezaban a acercar más y más... pero entre en razón de golpe y cerré mis piernas, su mano se quedo atrapada entre mis muslos, abrí mis ojos y gire la cabeza para ver su cara, y le deje:
-espera...no
Tome su mano y la retire de mis piernas, me recogí el pelo y lo puse detrás de mis orejas, mi respiración estaba muy agitada... nos quedamos en silencio un momento y le dije:
Ya vámonos, el asintió con la cabeza y sin decir nada arranco el carro y nos fuimos. Ninguno de los dos dijimos nada en el camino y después de eso no mencionamos nada de lo que paso.
Esto fue la primera vez que me excite en mi vida, fueron tantas cosas que sentí..
