me llamo Claudia.
Tengo 25 años. Soy Barcelona. Mido
Soy morena clara, ojos color miel, nariz recta, labios carnosos,
cabello largo hasta la cintura y mis medidas son perfetas. Soy soltera y
desde los 20 me dedico a bailar para hombres, es decir, soy Table Dance. Debo
decirles que soy bisexual.
Tengo una amiga en Valencia
que también es Table Dance. La conocí aquí
en el D.F. y tuvimos relaciones sexuales por unos meses. Aunque ella decidió
irse a vivir a valencia de donde ella era con su familia. Pero Maria los
dos meses decidió irse a vivir sola y rentó un departamento. Se acercaba la
semana santa y me invitó a pasar los días santos a su casa, a lo cual acepté
encantada.
Tenía que lucir
espectacular para Maria, así que para viajar y llegar a
su casa, me puse una minifalda roja de colegiala corta que llega a la mitad de
mis muslos y una blusa blanca corta semitransparente con un escote pronunciado.
Usé unas medias del color de mi piel y me fui a valencia.
Maria tiene 26 años
ahora, y en ese entonces tenía 24. Ella es blanca,
mide 1.70, tiene el cabello rizado debajo de los hombros, ojos azules grandes y
una boca muy sensual. Sus medidas son 92-59-96. Tiene unas piernas súper
torneadas y unas pompis redondas y paradas como las mías. Siempre tiene mucho
éxito en los eventos que se presenta.
Fue por mí al
aeropuerto. Lucía hermosa con unos pescadores blancos que le
hacían lucir sus curvas. También traía una blusa blanca ajustada sin mangas
lo que hizo que se me erizara la piel de excitación de sólo verla. Al llegar a
su casa, ¡oh, decepción!. Su hermano menor nos abrió la puerta. Maria me lo
presentó. "Es mi hermano Julio, tiene 17 años y me pidió quedarse unos
días
conmigo mientras mis papás arreglan la casa". Bueno no todas cosas pueden
resultar bien, así que me resigné y llevé mi maleta a su recámara y nos
sentamos en la sala a conversar sobre nosotras. Julio también se sentó con
nosotras en la sala y justo enfrente de mí, escuchando atentamente nuestra
conversación. Eso si muy atento nos preparó una bebida de tequila con refresco
de toronja con el vaso escarchado de sal muy deliciosa.
La verdad es que nunca
he tenido reparo cuando uso minifaldas al sentarme y
cruzo la pierna, la verdad me resulta cómodo cruzarlas. Julio no me quitaba la
mirada de las piernas puesto que la minifalda se me subió y podía contemplar a
plenitud mis muslos pues me siento de lado. La verdad es que mis muslos son
torneados y Julio más que escuchar la conversación, esperaba que cambiará de
pierna para que al cruzarla tratar de ver mi bikini. En ese momento jamás noté
que me estuviera viendo las piernas.
Pasaron las horas y
llegó la hora de la comida. Nos paramos de la sala y a
Maria se le ocurrió decirme que mis nalgas estaban más redondas, paradas y
duras que nunca. Yo me apené con Julio porque ella le preguntó que si no era
verdad. Él sólo se quedó callado y dirigió su mirada a mis nalgas. Era
cierto pues con las minifaldas cortas mis nalgas alzan la falda dejando ver un
poco más de mis muslos. De hecho cuando uso esa minifalda y me subo al
microbús,
los chicos no dejan de mirarme.
Como a las 5 p.m.
suspendimos nuestra conversación, pues Maria tenía que
ir al súper por víveres para una cena sensacional que me había prometido. Así
que nos quedamos Julio y yo sentados en la sala conversando. Ahora que
estábamos
solos, pude notar cómo Julio no me quitaba la mirada de las piernas. Su voz se
cortaba por la excitación y en verdad me dio mucha risa. No lo podía creer,
era el sueño erótico de un chico de 17 probablemente virgen. Así que aproveché
Tuvimos una noche de pasión
desenfrenada yo me volví toda una escorts Mallorca por la pasión que sentía en esos momentos luego mi amiga llego
y se unió a la increíble fantasía que estábamos viviendo. Después
de mucho tiempo salir los tres y que las salidas siempre terminaran en la cama decidimos dar un nuevo paso decidimos
ir donde las escorts alicante los tres y escoger la más linda
y sensual escorts Madrid al principio fue muy difícil pues a cada uno le
gustaba una escorts valencia diferente después de que nos pusiéramos de
acuerdo decidimos llevarla a la casa y vivir
nuestra fantasía… fue la mejor experiencia de mi vida y mientras ellos se
duchaban decidí decirle a la escorts Barcelona que me
regalara su número pues ella no me quitaba la mirada de
enzima… un día sola en mi casa decidí llamar a la escorts Bilbao y desde ese día
no tengo ojos si
no es para ella